La familia es el principal círculo social que una persona puede tener. De acuerdo a una investigación publicada en Psychology Science of Therapy, es fundamental realizar actividades que fomenten la convivencia familiar para lograr un sano desarrollo emocional y cognitivo.
Tener una buena relación con los hermanos y padres, fortalece los vínculos afectivos y mejora la autoestima de cada uno de los miembros de la familia. Para mejorar tu relación familiar, te sugerimos estos tips.
- Dediquen tiempo unos a otros. Apoya a tus hermanos y padres en sus actividades, juegos y aficiones.
- Traten de comer o cenar la mayor parte de la semana. Si tienen agendas complicadas, programen un día para comer juntos.
- Dediquen un día a la semana a hacer algo como visitar a los abuelos, dar un paseo, caminar, jugar, etc. su imaginación es el límite.
- Cocinen, limpien, jueguen, duerman, platiquen y rían juntos.
- Sean espontáneos. Cuando estén juntos disfruten del momento y compartan pequeñas experiencias, pueden improvisar juegos o simplemente ver una película.
- Dediquen tiempo para platicar. La comunicación es vital para fortalecer los vínculos afectivos de la familia.
- Celebren sus logros tanto familiares como individuales. Asimismo, motívense mutuamente para lograr metas.
- Cuando haya problemas, eviten las discusiones y las malas palabras. El respeto es un pilar fundamental para una sana convivencia familiar. Pueden elegir a alguien como mediador.
- Busquen formas de ayudarse mutuamente, sobre todo si alguien tiene fuertes problemas.
- Cuando surjan eventos importantes busquen la unión. Está comprobado que, al sentir el apoyo familiar, las personas toman decisiones más asertivas.
El amor y la comunicación son la base de cualquier tipo de relación familiar, por ello es importante desarrollar una sana convivencia. De esta forma las personas crecen y viven de una forma más saludable emocionalmente.