La familia es el núcleo social más importante donde cada integrante asume con responsabilidad y compromiso pertenecer a dicha entidad.
Cuando se oye la palabra familia se piensa de manera directa en un grupo de personas felices que comparten aspectos en común, sin embargo, la familia es mucho más que eso, porque es el espacio perfecto para formar en valores y principios a cada miembro, con la finalidad de conseguir un modo de vida más humano, que posteriormente, contribuirá a tener una mejor sociedad.
Formar y llevar a la familia en un camino donde existan pocos cambios no resulta ser nada sencillo, ya que las exigencias del entorno social pueden dificultar la colaboración y relación, debido a que en ocasiones ambos padres trabajan o bien los hijos tienen que cumplir con otras tareas. Para mejorar, debemos olvidar que cada miembro cumple con una tarea en específico, porque lo único que provoca es la falta de compromiso de cada uno, en donde solo se preocupan por sus propias responsabilidades, negándose la capacidad de ser colaborativos con el medio que les rodea.
Es necesario además reflexionar que el valor de la familia se basa fundamentalmente en aspectos como; el físico, mental y espiritual, por tal motivo cada persona debe de estar abierta al diálogo y a la convivencia, esforzándose por cultivar los valores partiendo de su propia persona, para encontrarse en condiciones de transmitirlos y enseñarlos a los demás integrantes.
La unión familiar debe irse construyendo todos los días con muestras de cariño y atención, porque de esa manera demostramos que estamos interesados por las personas con las que compartimos nuestra vida, ya sea esposos, padres, o hermanos.
La unión de los lazos familiares otorgará mayor satisfacción a cada miembro, porque el saberse valorado, amado y comprendido, favorece a la autoestima, mejora la convivencia y fomenta a guiarnos por un camino de paz donde el bienestar personal será el mejor regalo.
La clave para lograr una mejor convivencia también se centra en demostrar que se tiene tiempo para compartir en familia, a pesar de las diversas actividades por hacer, se deben de buscar espacios haciendo cosas como: paseos, días de campo, visitas culturales o juegos que pueden practicarse en el hogar.
Finalmente, todo lo anterior permite conocer al otro y nos revela el verdadero sentido de la familia, puesto que nos ayuda a ser mejores personas y nos provee con las herramientas necesarias para dar lo mejor que tenemos como seres humanos.
A través del Movimiento Social “No está chido”, queremos sensibilizar a los padres de familia sobre la importancia de no permitir que niños, niñas y adolescentes consuman alcohol y tabaco, brindándoles tanto a padres de familia como a los menores de edad las herramientas necesarias para evitar su consumo.
Vía unpf.mx