¿Sabes cuáles son los efectos del consumo de alcohol y tabaco en menores de edad?

El cerebro se encuentra formado por millones de neuronas, que al comunicarse hacen sinapsis, esto permite que se lleve a cabo el procesamiento cognitivo (memoria, lenguaje, atención, pensamiento, etc.) y la conducta.

Por su parte, las neuronas se encargan de la recepción, conducción y transmisión de señales para que puedan llevarse a cabo actividades tanto básicas como complejas que nos permiten aprender y descubrir.

El Sistema Límbico es el encargado de reconocer señales relacionadas con nuestras emociones, por ejemplo, la alegría, el enojo, la tristeza, entre muchas más (aprende más sobre las emociones en los siguientes botones).

Además, nos ayuda a recordar sucesos vinculados con las emociones y son la base para procesos cognitivos por su relación con la zona frontal del cerebro.

Como podrás haber leído, cada una de las partes y funciones del cerebro son fundamentales para el conocimiento de ser humano.

El cerebro tiene un importante periodo de desarrollo en la preadolescencia y adolescencia, en donde principalmente la corteza prefrontal tiene un crecimiento muy importante en el número de conexiones entre las neuronas. También existe un periodo de “poda neuronal” esto significa que las neuronas o sus dendritas que no realizan una función importante o están dañadas mueren.


Los cambios y desarrollo se va dando en la adolescencia, donde hay un crecimiento exponencial, a diferencia de la adultez, pues en ésta los cambios son menores aunque más constantes.

Entonces, ¿cómo afecta el consumo de alcohol y tabaco en el cerebro?

  • Es particularmente dañino en el desarrollo cerebral, provocando que las habilidades
  • cognitivas, motoras y conductuales se vean afectadas.
  • Se pueden destruir neuronas y disminuir el número de receptores de dopamina. 
  • Disminuye la actividad cerebral, afectando principalmente la corteza prefrontal, el Sistema Límbico y el lóbulo temporal.
  • Se acelera el proceso de envejecimiento cerebral. 
  • Deterioro de la memoria.
  • Alteración del sueiño.
  • Conducta de ansiedad y/o depresiva.
  • Problemas de apr4endizaje.
  • Dificultada para interpretar emociones propias y ajenas.
  • La nicotina del tabaco incrementa el reflujo gástrico.
  • Problemas de respiración y daño en los pulmones, debido a los químicos y toxinas de los cigarros electrónicos y de la nicotina.
  • Lentitud para pensar.
  • Dificultada para la toma de decisiones.

El consumo de alcohol y tabaco afecta el neurodesarrollo y, entre más temprana sea la edad, las afectaciones pueden ser permanentes en las habilidades básicas como la atención, el aprendizaje, la memoria, habilidades motoras.

Iniciar el consumo en la adolescencia puede provocar problemas a corto y largo plazo en funciones cognitivas complejas (funcionamiento ejecutivo y habilidades sociales), así como en las emociones secundarias (empatía, toma de decisiones, comprender las intenciones de otros, etc.)

Evitar el consumo de alcohol y tabaco en niños, niñas y adolescentes es fundamental para promover el desarrollo sano del cerebro.

LEAVE A REPLY

Please enter your comment!
Please enter your name here